Cómo crear un grupo de natación para ciegos y débiles visuales sin tener alumnos (Parte 2)
Por Mtra. Nut Hernández
Después de cuatro años consecutivos de trabajo e investigación observando de cerca a los niños y jóvenes que llegaban a nadar, los jóvenes (de 14 a 23 años) que llegaron por primera vez a realizar alguna actividad deportiva gracias a la difusión dirigida mediante los trípticos informativos o por invitación de un miembro activo del grupo, se observó que durante su infancia y adolescencia solamente se habían dedicado a estudiar la parte académica, lo que les ocasionó sedentarismo, estrés permanente y considerable en las personas con discapacidad visual, lo que repercute en el desencadenando otra atipicidades; como llegaban al finalizar los estudios de bachillerato, es decir al culminar la adolescencia, aprender a nadar se volvía muy complejo y frustrante ya que su esquema corporal y sus patrones motores ya están conformados, crear nuevos patrones motores necesarios para poder realizar la actividad acuática se vuelve muy complejo, debido a que las etapas sensibles para la conformación de patrones motores y esquema corporal ya se han concluido y mejorarlos implica mucho esfuerzo y conciencia por parte de los alumnos ciegos y del entrenador de natación.
Después de un análisis a conciencia entre los niños menores de 12 años que llegaban a nadar y quienes habían llegado por primera vez a la actividad después de los 14 años,se observó que a diferencia de los adolescentes entrantes en la adultez, los niños aprendían más rápido a nadar, interactuaban mejor entre ellos, con niños y adultos sin discapacidad visual como consecuencia de mejorar la movilidad corporal, adquirir más y variados patrones motores y afianzarlos a temprana edad, se observó una mejora del esquema corporal de la persona ciega y en el área académica se observó que aprendían mucho más rápido el sistema de lecto escritura Braille y lógica matemática, así como la comprensión de abstracciones del espacio (como los las nubes, el horizonte o la sombra, el paso del tiempo, entre otras), la resolución de problemas motores e independencia en la marcha con bastón blanco así como para ejecutar acciones cotidianas como vestirse o asearse sin auxilio de los padres de familia, eran superiores a sus pares que no acudían a actividades físico deportivas dirigidas, cuando por parte de las entrenadora de natación y los padres de familia observaron y comprendieron que esta mejora académica, corporal, de independencia y de calidad de vida, era gracias a la actividad deportiva de natación, se resolvió la incógnita sobre la necesidad que se satisface con la práctica de la natación:
“Contribuir a la formación integral del individuo con discapacidad visual, apoyándolo en la búsqueda de la independencia acorde a la edad biológica, mejorar su calidad de vida tanto en lo físico como en lo socioafectivo, así como la conformación de su corporeidad y patrones motores que le permitan enfrentar la vida cotidiana como un individuo socialmente productivo”
Cuando se entendió esto otra consecuencia positiva fue que la publicidad boca a boca por parte de los padres de familia, tuvo muchísimo más impacto que la difusión dirigida con el tríptico informativo, ya que los mismos padres de familia sentían la necesidad de que más niños realizaran actividad deportiva; tuvieron que pasar cuatro años para que se comprendiera la necesidad deportiva a satisfacer por parte de la natación para ciegos y débiles visuales y desde entonces llegar a la Alberca Olímpica Francisco Márquez a NADAR CON SENTIDO.
Entrar en la búsqueda de la necesidad a satisfacer de la natación para ciegos y débiles visuales, me empoderó y me interesó como nunca el introducirme en el universo del deporte paralímpico, cuando comprendí cuál era la necesidad por resolver por parte de la natación para personas con discapacidad, el grupo creció, se fortaleció y buscó una identidad, claro esa es otra historia y debe ser contada en otra ocasión.
Mtra. Nut Citlali Hernández Castro
Estudió la Licenciatura en Entrenamiento Deportivo y la Maestría en Ciencias del Deporte, en la Escuela Nacional de Entrenadores Deportivos (ENED), con la Especialidad en Natación y subespecializándose de manera autodidacta en para deporte.
Entrenadora Nacional de la Selección de Natación para ciegos y débiles visuales en el año 2007, por parte de la Federación Mexicana del Deporte para Ciegos y Débiles Visuales (FEMEDECIDEVI), cuenta con 4 preseas de bronce en los Juegos Para Panamericanos de Río de Janeiro 2007. Fundadora en 2008 del equipo de Natación para ciegos y débiles visuales Tiburones Blancos, ahora Ballenas Azules y creadora del programa de Para Natación de la Escuela Técnico-Deportiva de Para Natación con la que actualmente trabaja la Alcaldía Benito Juárez, la cual desarrolla el talento deportivo de los niños y jóvenes con discapacidad visual, parálisis cerebral, discapacidad intelectual, síndrome de down y trastornos motores.
Desde el 2016 es Docente Universitaria en la Licenciatura en Ciencias del Deporte, en la Universidad YMCA, impartiendo cátedra teórica-práctica, referente a la disciplina de Natación y Natación Adaptada.