Coordina: Dra. Lupe Aguilar Cortez
LA FAMILIA Y LA DIRECCIONALIDAD POSITIVA Y NEGATIVA DEL OCIO
Autora: MTRA. ISIS YOLANDA GALVÁN AGUILAR
“EL FUTURO DEL OCIO ESTA EN SU USO CORRECTAMENTE”
–BERTRAND RUSELL
LA FAMILIA Y LA DIRECCIONALIDAD NEGATIVA DEL OCIO
El papel que juega la familia es fundamental porque estamos pasando grandes efectos que no son positivos del todo y que están manifestándose en una enfermedad social generados por un modelo de familia autoritaria cargada de violencia o permisiva negligente con una ausencia total de estructura de paterna. Lo anterior hace pensar que no todo lo que se hace en el tiempo libre es positivo y que hay un ocio ausente y un ocio nocivo entonces su direccionalidad es negativa, encontramos familias sin sentido de vida, que no importando su nivel socioeconómico sus estilos paternos están generando modelos de familias disfuncionales.
En el estilo autoritario represivo los padres imponen las actividades recreativas y ocio piensan que es una pérdida de tiempo, condicionan sus permisos y actividades, se crean resentimientos en los hijos, el tiempo libre no existe, es el trabajo lo importante, incluso la esposa depende de las actividades que elige su marido, un ocio condicionado, consumo de ver TV al o lo que los padres quieran, conflictividad personal y/o social, violencia intrafamiliar, represión emocional.
En el estilo permisivo negligente, los padres dejan hacer a sus hijos lo que quieran, suelen presentar una dirección de premio o castigo, compran juguetes como tal, caros o de moda, hay libertad en los horarios de juego, siendo laxo permisos para fiestas, hay chantajes y manipulación de los hijos a los padres, hay excesos en la vida de los hijos, los padres dan más cosas materiales, hay vacíos emocionales, controversia axiológica, buscan experiencias fuertes, la individualidad de la pareja es un distanciamiento de la unidad familia, El aburrimiento es una constante en la vida de los hijos, consumismo y sedentarismo, uso de tecnología y redes sociales en exceso.
La familia disfuncionales cuando no sabe qué hacer en su tiempo libre, en su ocio deja pasar el tiempo y puede asociar al día soleado o nublado el tedio, fastidio, hastío o aburrimiento que llega a tener, en su historia personal los padres aprenden a matar el tiempo sobre todo si es el fin de semana el tiempo diario como sea se suele justificar en las ocupaciones de trabajo o de la casa.
En el fin de semana frase curiosa pasar o matar el tiempo es decir aquí pasándola con una carga emotiva de fiesta y alcohol, acostado dormido o acostado en sí, y los hijos repitiendo patrones de conducta y explorando los propios por ejemplo la fiesta, desvelo y la cultura de la noche. Viviendo un ocio nocivo sumándose a lo que los demás hacen porque sí, suelen decir los jóvenes.
Los riesgos psicosociales están presentes derivados de ambientes familiares problemáticos y vacíos emocionales, lo primero se puede superar y romper con la idea que determina hay que cambiar el paradigma de vida y los vacíos emocionales hay que revisar lo interior de cada uno y atendernos que lleve a mejorar nuestra vida.
LA FAMILIA Y LA DIRECCIONALIDAD POSITIVA DEL OCIO
En la familia las primeras enseñanzas de ocio son valiosas, se aprende con el ejemplo y lo que se haga en el entorno familiar repercute positiva o negativamente en el proceso de vida, lo cambios por una parte en el transcurso de la vida de niño a joven el despeje del vínculo familiar y por otro lo que se hace es decir el tiempo libre, la direccionalidad del ocio, positivo o negativo.
Aquello que compartimos en la niñez sea juegos, deportes, artes y actividades al aire libre o acciones sociales solidarias más allá de ocio casual, ocasional o consumo, es decir cuando hay formación en una práctica y se desarrollan habilidades, destrezas favorecerá en su personalidad y educación del carácter. Esto como parte de la educación familiar camina a una direccionalidad positiva del ocio, cuando la parentalidad es asertiva los hábitos de ocio son saludables, por ello los padres deben pensar el sentido de vida y de modelo de familia con el cual están formando, el funcionamiento en la dinámica genera cohesión, unión en sus miembros del sistema familiar en su conjunto y en los subsistemas naturales y que al actuar se vivencien como familia nutridora y funcional.
El ocio en la familia conlleva a desarrollar habilidades personales y sociales comunicativas, a mejorar las relaciones interfamiliar, da pauta para desarrollar la afectividad y generar emociones y sentimientos positivos. Esto cuando el ocio y el tiempo libre es parte del proyecto de vida y de las funciones de la familia.
Por lo tanto las vivencias de ocio y tiempo libre llevarán a experiencias satisfactorias, en el grupo familiar los hijos están aprendiendo a elegir que les gusta hacer, a identificarse con la práctica a reconocer su capacidad y esto hace que día a día mejoren y se apropie como tal, la va haciendo parte de su vida, hay dominio y alcances cuando hay apoyo de parte de la familia los lazos afectivos se fortalecen y servirán de correspondencia a una direccionalidad positiva del ocio tanto personal como grupal, cuando esto sucede con las familias que desarrollan estilos parentales autoritativos o inclusivo permisivos indulgente hacen modelos funcionales que hacen que la sociedad evolucione y mejore. Los padres preguntan a los hijos sus gustos e intereses los padres explican a sus hijos sobre pro y contras sobre las decisiones que toman los hijos, se ponen de acuerdo en los horarios, los padres como pareja establecen sus gustos y comparten sus experiencias, hay un ocio en común.
En este siglo XXI se habla de una sociedad de ocio por ello tiene importancia abordar el tema de un ocio familiar, que destaque sus valores de superación, de ocio activo de un ocio autotélico, de un ocio serio y sustantivo que lleve a experiencias satisfactorias. Es entonces un ocio familiar funcional fundamental en la construcción de un ocio significativo donde las vivencias conjuntas pasen a experiencias vitales personales y de conjunto familiar y social.
Entonces, a la suma de familias que versan en un ocio familiar funcional y significativo potencian el desarrollo social puesto que la direccionalidad positiva abre horizontes de una mejor sociedad.