Por: Gonzalo García
Antes de hablar de cómo elaborarlos, mi objetivo el día de hoy es continuar creando consciencia en nuestros lectores sobre la formación, dirección y control de un ser humano que comúnmente llamamos deportista.
Los deportistas tienen una virtud muy bonita por naturaleza, el materializar los sueños. Durante su camino como practicantes tienen una idea que los hace caminar y conocerse, sin importar la edad, existe esta idea tan fuerte que los dirige sin titubear, y es este sueño en convertirse en los más reconocidos deportistas, en lograr una presea, vencer un miedo, mejorar sus habilidades, etc. Estas ideas que son los sueños se materializan en objetivos, ya sean de resultados o de procesos, ambos muy importantes que si logramos hacerlos conscientes aprenderemos de nuestras experiencias, invitándonos a mejorar, claro, sino nos juzgamos creando etiquetas de ganar o perder, si no que se logró, que se mejoró y si no es así ¿porque no?, llevándonos a la reflexión.
La importancia del establecimiento de objetivos radica en que es un elemento que se centra sobre el comportamiento y puede llegar a convertirse en una motivación, la cual se incrementa si además la persona recibe retroalimentación del curso de su conducta para alcanzarlos. Los objetivos se constituyen en un reforzador que mantiene elevada la motivación.
En el centro de la teoría del establecimiento de objetivos se encuentra la idea de la acción con propósito. La gente elige los objetivos que se relacionan con la satisfacción de sus necesidades, la aspiración y la búsqueda de objetivos son parte central del proceso de la vida misma. La acción consciente y auto-dirigida es la responsable de casi todo lo que la gente hace, esta búsqueda incita el proceso motivacional.
Los objetivos realistas pero desafiantes son importantes para la motivación del atleta en el entrenamiento y durante la competición. Lograr objetivos en la práctica por medio de la repetición en escenarios similares al ambiente de competición infunde confianza. La confianza deportiva en atletas hace divertida la participación y es esencial para la motivación.
El establecimiento de objetivos personales en los deportistas es el espejo en el que ellos evalúan el mejoramiento, el óptimo desempeño y sobre la mejora que van teniendo a través de sus entrenamientos. Así mismo le permite al atleta avanzar en su recuperación cuando existe una lesión muy fuerte.
Muchas cualidades de la voluntad tal como la perseverancia, determinación y valor pueden verse beneficiadas mediante el establecimiento de objetivos. El deportista puede adquirir un mayor grado de responsabilidad, madurez y estabilidad en la lucha por conseguir sus logros.
Antes de establecer objetivos, es importante tener claro el desafío que se enfrentara, hacer una valoración de las habilidades que se tienen y las habilidades que se necesitan para enfrentar ese desafío, de aquí partiremos a los objetivos, que se tiene que mejorar o cambiar es vital antes de emprender el viaje directo hacia ese desafío.
Debemos tener claro que los objetivos son cambiantes, ya que el contexto deportivo se mantiene en constante cambio y no podemos tenerlos fijos.
Los objetivos logran que nos enfoquemos, que utilicemos nuestra imaginación y a su vez logra que soñemos. Tomar en cuenta lo más relevante para alcanzarlo y que por ende nuestra atención este al 100% en la tarea y no en los distractores.
Gonzálo García Díaz Sandi
- Psicólogo Deportivo
- Entrenador Deportivo
- Cinta negra 4to Dan
- Ex Seleccionado Nacional de Taekwondo