Algunas reflexiones en torno al termino deporte. Origen y evolución.

Luis Felipe Contecha Carrillo[1]

lfcontechac@ut.edu.co

Resumen

El Baloncesto y el Voleibol fueron creados en 1891 y 1895, respectivamente. Los Juegos Olímpicos se restauraron en 1896; entonces, ¿dónde y como surgió la palabra deporte?, ¿en qué contextos, qué acontecimientos y actividades fueron las que hicieron posible su uso?, ¿a qué tipo de actividad se hace referencia cuando utilizamos el término deporte? Este escrito pretende responder estos interrogantes mediante el análisis de los textos que versan sobre el tema. Lo aquí expuesto es una mirada subjetiva y un aporte para el análisis y estudio de lo que hoy se denomina deporte.

Palabras clave: juego, deportare, depuerto, deporte

Introducción

El Fútbol, la Natación, el ciclismo, el Remo, el Atletismo, el Tenis, y el Esquí eran actividades llamadas así, por su nombre, y se practicaban en Inglaterra desde finales de 1800 y comienzos de 1900. Igualmente, las asociaciones que agrupaban a los practicantes datan de esa época; por ejemplo: en 1863 la Football Association, el Amateur Athletic Club en 1866, la Amateur Metropolitan of Swimming Association en 1869, la Rugby Football Asociación en 1871, la Bicyclits Union en 1878, la Federación Europea de Gimnasia en 1881, la Metropolitan Rowing Association en 1879, la Amateur Boxing Association en 1884, la Hockey Association en 1886, la Federación Europea de Remo en 1892, la Lawn Tennis Association en 1895, la Amateur Fencing Association en 1898 y ya en 1904 la Federación Internacional de Futbol Asociado “FIFA”.[2]

Y si juegos como el Baloncesto y el Voleibol fueron creados en 1891 y 1895, respectivamente;  y si el certamen que convoca a todos los practicantes y a todas las asociaciones llámese Juegos Olímpicos se restauraron en 1896; entonces, ¿dónde y como surgió la palabra deporte?, ¿en qué contextos,  qué acontecimientos y actividades fueron las que hicieron posible su uso?, ¿a qué tipo de actividad se hace referencia cuando utilizamos el término deporte?

En tal sentido, en este artículo se procura responder estos interrogantes mediante el análisis de los textos que versan sobre el tema. Además, la polisemia del termino hace necesario precisar que lo aquí expuesto es una mirada subjetiva y un aporte para el análisis y estudio de lo que hoy se denomina deporte.

Dónde y como surgió la palabra deporte

Estudiosos del tema desde diversas perspectivas se han ocupado del término deporte; esto para significar que definir el deporte es una tarea compleja, veamos: etimológicamente su significado es claro en tanto que sus raíces provienen del latín y no del inglés. Sin embargo, cada autor, en su época y contexto, en el momento de utilizar el término acude a otras palabras, como, por ejemplo, juego, sociedad, riesgo, heroísmo, esfuerzo muscular, ejercicio físico, competición, record, apuestas, tecnología e industrialización.

Esta aseveración se ilustra con otro ejemplo: la mayoría de los autores consultados, para el presente trabajo, hacen referencia a la actividad deportiva de occidente, mientras que las de oriente por ser practicadas por menor numero de personas no se demanda tal literatura; por tal razón, es conveniente anotar que los autores consultados son occidentales lo que se traduce en un sesgo de origen geográfico.

Etimología

La palabra deporte, avanzada ya la segunda mitad del siglo XX evoca realidades humanas y sociales muy diferentes.[3] Cagigal, trascribió y analizó los cuadros resumen de un riguroso estudio realizado por Piernavieja, M., titulado “Depuerto”, “deporte”. Protohistoria de una palabra,[4]  en donde recoge las formas lingüísticas y el significado textual de cada una desde sus orígenes.

Del cuadro citado se concluye, por ejemplo, que el término deporte tiene sus raíces en el latín deportare y no en el vocablo inglés sport.

Es que, deporte (depuerto, deport, deportar, etc.) se concretó en los idiomas romances, en los siglos XII y XIII como una palabra que significaba ante todo diversión. También señalaba una marcada tendencia a ejercicio físico. Igualmente, se observan otras significaciones más o menos cercanas como pausa, juego amoroso, burla y diversión obscena.  Lo anterior permite inferir que deporte significo, ante todo, desde sus orígenes, diversión.

Actualmente con el término deporte se designa un tipo de actividad con unas características determinadas, aunque la propia definición origina a múltiples controversias en distintos autores; entre los que se cita a Hernández M., quien también se apoya en los cuadros resumen de Piernavieja, cuando sostiene que:

“El carácter polisémico del término se constata si hacemos un rápido repaso histórico sobre la delimitación conceptual del término deporte, tal como han realizado algunos de los principales autores que han trabajado en este ámbito. Desde esta óptica podemos comprobar no solo la evolución del concepto sino también el origen de algunas controversias”[5]

A continuación se citan algunos de los autores que se han ocupado del término y el concepto de deporte: Pierre de Coubertín, Georges Demeny, Cagigal, Mandell, Carl Diem, Ortega y Gasset, Bernard Jeu, Lüschen y Weis, Riezu, Landeers. Huisinga, Garcia Ferrando, Parlebas, Blanchard y Cheska, Hernández Moreno, Carballo C y Hernández N, Eric Dunning, Rodríguez López y Bourdieu, entre otros.  La importancia de los aquí citados, radica en que son autores de diferentes épocas, y corrientes del pensamiento que en algunos casos coinciden en acercamientos, como es el de aceptar el origen del término en el estudio de Piernavieja, en reconocer que la actividad ha sido una transición del juego al deporte y en caracterizarlo en dependencia del tipo de actividades que se practica.

Sin embargo, estos autores se distancian cuando tratan de clasificar las actividades, por ejemplo, cuando lo asumen como juego o como espectáculo o cuando incurren en discusiones desde perspectivas científicas como es el caso de Cagigal, en España o de Parlebas en Francia.[6]

En ese sentido, el deporte, en tanto recreación o pasatiempo, se ha desarrollado o alterado habitualmente en determinados medios sociales a lo largo de extensos periodos de tiempo.

Los deportes populares tradicionales justifican y refuerzan la posición de la clase que los practica o que los contempla como espectador. Sin embargo, con el advenimiento de un nuevo tipo de escritores en el Renacimiento se abre un nuevo periodo de la historia del deporte. Los pasatiempos, los juegos, las competiciones y el ejercicio físico pasaron a ser materia de meditación, análisis y debate, y se sentaron los criterios de selección de determinados deportes en detrimento de otros con base a su utilidad ideológica.

Los intelectuales europeos, en su época, empezaron a valorar el deporte (como todo lo demás) en función de su aplicación práctica.

Entre estos intelectuales son obligada cita: el pedagogo Vittorino da Deltra (1378-1466), los filósofos Martín Lutero (1483-1531), Rebelais (1490-1553), Michel de Montaigne (1533-1592), Thomas Elyot (14990-1546), John Milton (1608-1674), John Looke (1632-1704), J.J. Rousseau (1712-1778). En palabras de Mandell, Conviene aclarar que los teóricos de la educación de los siglos XV al XIX no pensaban que algún día sus proyectos podían tomar forma.

En su época numerables actividades de juego se desarrollaron, la educación física fue un tópico filosófico y literario muy arraigado, aunque limitado en sus efectos sobre la vida cotidiana; el impacto de las ideas sólo se manifestó después, del siglo XIX. De hecho, el deporte en su forma actual sólo guarda una relación muy lejana con las distracciones socialmente clasistas y conservadoras de los europeos premodernos.

Por lo tanto, el deporte visto como actividad física, tiene sus antecedentes en la caza, el rito, la guerra[7]. Los ejercicios tanto en la escuela como fuera de ella, en el ocio, la gimnasia la educación física, la recreación y en los juegos.

Ahora, analizado desde lo social, observamos una estrecha relación   entre el deporte y las clases sociales, es decir la evolución de los acontecimientos sociales y la misma evolución del deporte parece ser infinita. Para sustentar tal afirmación se recurre a Cagigal cuando afirma:

“Sucedió que la educación física surgió en el mundo contemporáneo como una derivación o normal crecimiento de los movimientos gimnásticos. Estas gimnasias que sustancialmente consisten en estudio y practicas analíticas del movimiento y de las posturas, se habían desarrollado al margen del brote del deporte moderno, que casi con coincidencia de fechas iba a iniciar su internacionalización a partir fundamentalmente de esquemas británicos. Sucedió que el deporte, merced a su intrínseca espectacularidad y merced a otros factores socio-antropológicos comenzó a conocer un éxito sin precedentes; llego el nacimiento de federaciones internacionales y la aparición de estructuras supranacionales cuya fuerza ha ido creciendo. Este prestigio fue descubierto por personas influyentes ajenas a la profesión educativa (industriales, comerciantes, hombres de negocios, políticos, etc.) los cuales se introdujeron en las filas directivas del deporte nacional e internacional. Por ello el deporte tomo direcciones imprevistas con crecientes implicaciones económicas, políticas, etc. El educador físico, a quien el pueblo con certeza y fina intuición tendía a identificar con el hecho deportivo, se apresuro a decir que el no tenía nada que ver con este deporte desmesurado. Parcialmente tenía razón; pero, sin querer, los educadores físicos se alejaron de la voluminosa parcela derivada del movimiento humano”

Cagigal[8]  hizo esta afirmación en 1972; hablaba de la deportivización de la educación física y llego a la conclusión que el deporte se bifurca en dos grandes vertientes; el espectáculo deportivo y la sencilla práctica individual o de pequeño grupo lo que hoy tanto se conoce con el nombre de deporte para todos. Son dos realidades humanas dispares, dos actitudes diversas. Pero sociológicamente no pueden separarse tajantemente una de otra. Pues una de las motivaciones para que los niños se aficiones por el deporte, es la imagen de los grandes ídolos que vende la televisión, al educador físico le corresponde una vez aficionado el niño poderle mostrar los valores del deporte.

El apoyar los enfoques educativo-deportivo que se integran en el segundo camino del deporte “el deporte para todos” es función de las instituciones de educación, no sin querer decir que pierda alguna de sus características, sino por que allí debe ser utilizado como un medio y no como un fin. Mientras que la primera opción obedece a una actividad deportiva movida por el trabajo, el dinero, la televisión, el marketing, es decir el deporte instaurado en una sociedad espectáculo a manera de hazañas y de records, movida por el sensacionalismo, pero al fin un deporte denigrado en muchos casos, pero lleno de elemental prestigio. Cagigal concluye diciendo que en el fondo es una variante social, gigantesca si se quiere, del simple hecho humano de la competición lúdica en forma de ejercicio físico.

El deporte moderno

El deporte moderno tiene sus raíces en lugares y condiciones sociales e ideológicas concretos:

“El deporte, tal como lo conocemos hoy, apareció en el marco de unas condiciones sociales especiales, y se moldeo según los cánones de placer y de ocio de ciertas clases sociales. Este deporte moderno, o mejor dicho (y más ambiguo para el historiador), estas actitudes hacia el deporte, evolucionarían mucho mas rápidamente en América y, por esa vía, conquistarían el mundo” (Mandell.  Pág. 140))

Mandell, aquí reafirma que la mayoría de manifestaciones lúdicas que hoy se denominan deporte eran practicadas por los ingleses, pero eso no quiere decir que otras sociedades no tuviesen tradición festiva, no, lo que sucedió fue que los ingleses siempre han sido más deportivos.

Lo que hoy llamamos deporte evoluciono con la sociedad inglesa a medida que esta se iba transformando con la industrialización, evolucionó tanto que igual que el comercio se dirigía más hacia la consecución de una eficacia que debía hacerse patente y demostrable estadísticamente y con éxitos constatables.

En ese sentido, todos los estamentos sociales de alguna manera fueron artífices en la evolución del deporte, y las universidades incidieron grandemente en el surgimiento de algunos deportes su institucionalización y sentido competitivo en el mundo[9]

Simultáneamente a esta actividad se daban otros movimientos de mucha importancia en temas como Gimnasia y deporte, institucionalización del deporte, escuela y deporte, los Turner alemanes (hoy clubes deportivos o de alguna manera gimnasios en nuestro medio), los Zokols en Checoslovaquia, los Maccabi o clubes deportivos judíos, instituciones que generaron movimientos sociales para mejorar la salud y la moral de sus ciudadanos, de esta manera evoluciono el deporte que se sería llamado de masas con connotaciones políticas movimiento que a lo largo del siglo XX adquirió formas mas originales en Alemania.

Y así, de esta manera se llega a lo que seria el deporte en estados Unidos, país colonizado por inmigrantes ingleses que raras veces procedían de las clases acomodadas. De esta manera encontramos una justificación a la afirmación de Mandell cuando dice que el deporte americano fue durante mucho tiempo sinónimo de deporte inglés trasmitido y adaptado a excepción, evidente del béisbol.

De tal manera que la actividad deportiva en los estados Unidos evolucionó continuamente como resultado de un sinfín de decisiones y después de superar restricciones.

Tras la guerra civil esa evolución se afianzó gracias a la fuerza, el vigor de la población trabajadora, la aparición de grandes ciudades unidas entre si por una extensa red de comunicaciones y transportes (el ferrocarril), y el ingente capital disponible, la continua experimentación de nuevas tecnologías, los nuevos sistemas de producción, los medios periodísticos y sobre todo la disposición favorable de los gobiernos.

Igualmente contribuyó a ese despliegue la rápida adopción de nuevas técnicas por los organizadores, el gusto por los récord estadísticamente demostrables y verificables, la organización supra-regional; elementos típicamente americanos que en otras partes del mundo despertaban un escaso interés.

Hacia 1900 el proceso había sido tan rápido que el deporte alcanzó una evolución en estados Unidos como en ningún otro lugar se había experimentado.

De otra parte, es conveniente reflexionar sobre la incidencia de los juegos Olímpicos modernos[10] en la evolución del concepto de deporte. De hecho, este trabajo no pretende ahondar sobre el movimiento olímpico, pero si dejar planteada una discusión en torno al tema propuesto. Sin embargo, es necesario mencionar que desde 1896 y hasta 1912[11] los Olímpicos fueron unos festivales deportivos desarrollados en el marco de Ferias o fiestas internacionales. Solo hasta después de la Olimpiada de 1932 en los Ángeles se empezó, según Mandell, a ver el deporte en todo el mundo como algo serio.

A manera de síntesis, digamos que al término deporte hoy entre otros muchos usos se le combina con:

Deporte formativo

Deporte escolar

Deporte competitivo

Deporte elite

Deporte y salud

Deporte comunitario

Deporte estatal

Deporte privado

Deporte recreativo

Deporte espectáculo

Deporte para todos

Cada una de estas expresiones adquiere su propia definición en dependencia de quien o quienes se sirven de ella, cada uno juega con ella y le impone restricciones y limites.

REFERENCIAS

• [1] Profesor titular de la Universidad del Tolima, Colombia., Doctor en Ciencias de la Educación, Integrante del Grupo de Investigación OCUFIS, Miembro de la Academia Olímpica Colombiana
• 2 ALTUVE; E. (1996). Artículo publicado en la revista KINESIS, Nº 30
• 3 CAGIGAL J.M. (1972). En Deporte Pulso de nuestro tiempo. El autor presenta una serie de ejemplos sobre el significado de la palabra deporte y la vinculación que el deporte tiene con variados aspectos de la vida humana.
• 4 Es un estudio de los documentos medievales que cataloga todas las primitivas formas ortográficas de ese concepto. El trabajo se ciñe a los idiomas provenzal, antiguo castellano, antiguo catalán y antiguo francés. Según Cagigal el estudio prácticamente alcanzó los verdaderos orígenes de la palabra ya que los estudiosos de sus fuentes en Alemania e Inglaterra (Groll, Diem, Amsler, etc.) unánimemente aceptan su paternidad mediterráneo-occidental
• 5 HERNÁNDEZ M. Acerca del término Deporte. Artículo en  la revista digital  Lecturas de Educación Física y Deporte año 4 – N° 17 Buenos Aires diciembre 1999.
• 6 Hernández, M. J. 1994. (Pág. 10)
• 7 Huizinga, historiador medievalista y filosofo del juego, afirma que el verdadero deporte de la aristocracia medieval era la guerra.  citado por Mandel. p 121
• 8 CAGIGAL, J.M. (1928.1983). Autor de varias obras de educación física es considerado como uno de los más importantes teóricos de la materia en la actualidad. Su visión humanística y científica parece haber abierto nuevos cauces al desarrollo de las ciencias del movimiento. Entre sus obras, “Cultura intelectual y cultura física”, “Oh deporte”, “Deporte: pulso de nuestro tiempo”.
• 9 Para ampliar esta información ver a MANDEL Richard D. Historia Cultural del Deporte. Bellaterra ediciones Barcelona 1986. p141, 196, 197, 198.
• 10 Para el estudio y análisis histórico de los Juegos Olímpicos se conocen tres épocas: Prehistoria (antes del año 776 A.C), Antigua (año 776 al 373 A. C) y la época moderna (desde el año 1896 con los juegos en Atenas)
• 11 Pierre de Coubertin en Memorias Olímpicas, obra escrita en 1913, en 1937, expreso: “dos veces más en 1904 y 1908, y debido a razones presupuestarias nos veríamos obligados a establecer contacto con exposiciones. No fue hasta 1912 que, gracias al esfuerzo sueco, se consumo el divorcio” p.37
• ALTUVE, E. (1996). Hacia una comprensión de la dinámica deportiva olímpica. En revista KINESIS. Edición numero 30. Más allá de los números, del patriotismo barato y del espectáculo adormecedor. Armenia, Quindío: Editorial KINESIS.
• CAGIGAL, J. M. (1972). Deporte, Pulso de nuestro tiempo. Madrid. Editora Nacional
• HERNÁNDEZ, M. J. (1994). Fundamentos del Deporte Análisis de las estructuras del Juego Deportivo. Barcelona: INDE Publicaciones.
• Revista APUNTS Educación Física y Deportes. (1988). INEFC. N° 54 – 4° trimestre.
• BLANCHARD K Y CHESKA A. Antropología del Deporte. (1996).  Bellaterra s.a Barcelona.
• ——————–OH Deporte (Anatomía de un gigante) Colección KINE de educación y ciencias deportivas. Miñon S.A. España 1981.
• De COUBERTIN P.   Memorias Olímpicas, Comité olímpico Internacional 1975
• JEU, B. (1988).  Análisis del deporte. Bellaterra, Barcelona.
• MANDELL, Richard D. (1986). Historia Cultural del Deporte. Bellaterra,  Barcelona.
• RODRÍGUEZ, L. J. (1995).  Deporte y Ciencia, teoría de la actividad física. INDE publicaciones, Barcelona.
• REVISTA Olímpica, Sydney 2000, ¡Qué empiecen los juegos!. XXVI – 34 Agosto – Septiembre 2000,  Órgano Oficial del Movimiento Olímpico
• ————————— Sydney 2000, Los Juegos de la XXVII Olimpiada. XX VII – 35 Octubre – Noviembre 2000, Órgano Oficial del Movimiento Olímpico
• CARBALLO, C y otros.  (2003). Acepciones del concepto de deporte. Polisemia e investigación. En REVISTA DIGITAL www.efdeportes.com Nº 57
• HERNÁNDEZ M, A. (1999). Acerca del término deporte. En REVISTA DIGITAL EFDEPORTES  Nº 17 Buenos Aires.
• LOPEZ R, A. ¿Es la Educación Física, ciencia? (2.003). En REVISTA DIGITAL EFDEPORTES.COM. Nº 62, Buenos Aires
• ZAGALAZ s, M L. (2001). Corrientes y Tendencias de la Educación Física. INDE, Barcelona.

Luis Felipe Contecha Carrillo  

Destacado especialista en educación física y deporte, reconocido por su sólida preparación académica, influyentes publicaciones y significativos logros profesionales. Su formación incluye una Licenciatura en Educación Física y una especialización en Teoría y Metodología del Entrenamiento Deportivo de la Universidad Pedagógica Nacional de Colombia. Continuó su desarrollo con una Maestría en Educación de la Pontificia Universidad Javeriana y un Doctorado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, consolidando una base de conocimientos profunda y multidisciplinaria. Ha compartido su experticia a través de numerosas publicaciones, incluyendo artículos científicos sobre periodización, biomecánica y psicología del deporte, y el influyente libro “Entrenamiento Deportivo: Bases Teóricas y Aplicaciones Prácticas”. Profesionalmente, ha sido un dedicado docente universitario, formando a futuras generaciones. Su rol como metodólogo deportivo en federaciones nacionales ha impulsado el rendimiento de atletas de alto nivel, y como consultor en salud pública, ha promovido la actividad física para el bienestar colectivo. Su trayectoria lo posiciona como una figura clave en el ámbito deportivo y educativo.