En el sexto capitulo del libro de las revelaciones de la Biblia, en el contexto de un mundo que llega a su fin, el cielo se abre y de las alturas surgen cuatro corceles imponentes que arrojan luz sobre las principales angustias del ser humano y que, según la iconografía judeocristiana, los jinetes del Apocalipsis representan las más graves desgracias de la humanidad, siendo el hambre la guerra, la peste y la muerte que, según el fragmento bíblico, serían las condiciones que llevarían al mundo a su exterminio final, símbolos de angustias de la raza humana y que, bajo los colores de los caballos blanco, bermejo, negro y amarillo, tienen un significado simbolico que hoy nos ayudan a describir a los nuevos jinetes que se presentan en pleno año 2022 y que serían el hambre, la guerra, la inflación y la sequía.
Por lo que, de acuerdo con datos de carácter oficial, en materia de hambre, a nivel internacional el impacto en la población se ha incrementado en un 10% por diversos factores, entre ellos, la guerra por la invasión de la Federación de Rusia a Ucrania, los efectos pandémicos del covid-19 y el que más de 828 millones de personas han padecido hambre en el año 2021. En América Latina y el Caribe, 4 millones de personas pasaron a situación de hambre, haciendo un total de 56.6 millones en esta situación y 4 de cada 10 viven con inseguridad alimentaria.
De acuerdo con datos oficiales de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). del total de personas con hambre en 2021. 7.4% vive en nuestro hemisferio, siendo el Caribe la región con mayor proporción de población que pasa hambre, mucho de esto deriva por el incremento en los costos de los alimentos, acceso a comidas nutritivas y precios que se han disparado a más del doble, de acuerdo al indice mensual de ali mentos de la FAO.
El conflicto bélico que inicio el 24 de febrero en Europa ha ocasionado incrementos hasta del 73% en los precios mundiales de los alimentos y el combustible y los fertilizantes empujan al mundo a una hambruna que pone en duda el poder alcanzar uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), precisamente el dedicado a erradicar el hambre para el año 2030, la inflación y un bajo crecimiento económico. los principales factores en América Latina, sin embargo. el incremento en la pobreza se debe también a elementos globales, como el problema de suministro de trigo, debido a la guerra, y se prevé que la pobreza regional aumentará este año a 33%, con énfasis en México, Colombia, Brasil y Paraguay, de acuerdo al estudio de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL). Si la inflación actua según lo previsto. la pobreza en México aumentaria 1.3 puntos porcentuales, que afectaría a más del 36% de su población.
De acuerdo con datos de carácter oficial en materia de hambre, a nivel internacional el impacto en la población se ha incrementado en un 10%.
El cambio climático es un tema que está transformando la vida del planeta, y la sequía y falta de agua son fenómenos globales que están poniendo en riesgo la viabilidad de diversos sectores de la sociedad, por lo que tenemos que pensar global y actuar local en este tema. Es imperativo mantener subsidios a alimentos, implementar acuerdos de contención de precios de la canasta básica y reducir o eliminar aranceles en la importación de granos y productos básicos.
Daniel Aceves Villagrán