Por Daniel Aceves
El concepto “economía circular” tiene consideraciones que coinciden al nuevo modelo de producción y consumo que busca alargar la disponibilidad de diversos recursos, fundamentalmente naturales, para las generaciones venideras, transformando también la operación de la industria y los hábitos de consumo para que haya un crecimiento sostenible, que implica la optimización de recursos, la disminución en el consumo de materias primas y el aprovechamiento de los residuos a través del reciclamiento o prolongación de la vida útil de los productos; hay ideólogos del tema que argumentan que la idea surge de imitar a la naturaleza, donde todo tiene valor y todo se aprovecha, donde los residuos se convierten en un nuevo recurso, logrando una sostenibilidad.
Con base en una iniciativa presentada en la Cumbre del G8 de 2004, por parte del primer ministro de Japón y la organización Greenpeace, para promover más hábitos responsables capaces de reducir los residuos urbanos en abono a la vida del planeta, para ello, inicialmente, en este contexto se incorporaron las tres erres que significaban Reducir, Reutilizar y Reciclar, después se agregó el concepto de Reparar y, en la última generación en la economía circular se han incorporado, en total, siete erres, las cuales se manifiestan de la manera siguiente: Rediseñar, concepción para tener en cuenta la funcionalidad del producto, además, las consecuencias medioambientales que pueda provocar el ecodiseño de materiales fácilmente reciclables, como envases y métodos de fabricación sostenibles.
Reducir, que radica en la disminución del consumo de productos para, así, impactar positivamente en el volumen de residuos y la explotación de materias primas, ahorrando agua, energía y contaminación, particularmente productos de usar y tirar. Reutilizar, que fundamenta prolongar la vida útil del material o recurso de carácter natural, por ejemplo, a todos los excedentes de alimentos dar segunda vida para consumo humano o animal. Reparar, la cual promueve contribuir a reducir residuos buscando dar una segunda oportunidad a aquellos implementos que se han descompuesto y, así, abaratar la resolución de un tema técnico o mecánico que, a la larga, será más barato.
Renovar, proceso para dar segunda vuelta de uso a objetos antiguos, con una nueva funcionalidad o renovarlos y compartir, por ejemplo, muebles que sigan generando una utilidad.
Recuperar, que los desechos generados sean reintroducidos de nuevo en el proceso productivo, de tal forma que se podrán crear nuevos productos usando menos materias primas y, Reciclar, concepto más conocido e implantado en la mayor parte de los sectores de la sociedad y, en éste, el tema de educación ambiental es fundamental, ya que la colocación de los residuos en el lugar correcto ayuda a evitar la contaminación y extracción de materias primas.
En síntesis, la economía circular protege el medio ambiente, reduciendo emisiones y la generación de residuos, beneficia la economía local al fomentar modelos de producción basados en la reutilización de residuos cercanos como materia prima, fomenta el empleo, ya que es un nuevo modelo industrial, innovador y competitivo, generando crecimiento económico y fuentes de empleo, lo que favorece la independencia de recursos, en el entendido de que la reutilización de recursos locales coadyuva a una menor dependencia de la importación de materias primas; la diferencia con la economía lineal consiste en que es un modelo de producción en donde extraemos, producimos, consumimos y desechamos, siendo una expresión rápida, pero poco sostenible para el planeta. En conclusión, la economía circular busca que los recursos se mantengan en la economía el mayor tiempo posible.