¿Has escuchado la frase “yo era bueno pero me lastime la rodilla”? comúnmente suele ser graciosa, sin embargo refleja una situación alarmante y real en el entrenamiento o bien la competencia; esto puede derivar de una clara falta de prevención de lesiones.
Uno de los logros más grandes del equipo multidisciplinario es la prevención. Si bien la labor de reincorporar a un atleta a la práctica deportiva después de una lesión es de suma importancia, la prevención resulta ser mucho más positiva.
La preparación previa a la maestría deportiva,es la fase de la preparación en la cual el organismo genera adaptaciones que favorecen la preparación especializada.
Muchas veces escuché -“profesor, yo en la competencia no hago sentadilla y no cargo peso, solo debo tirar a gol”-, lo cual resulta ser un argumento válido, sin embargo la sentadilla tiene otro fin.
No significa que ese ejercicio es el que realizarás en la competencia, es una actividad que provocará una adaptación cuyo objetivo es ayudarte a la práctica deportiva; una sentadilla puede tener diferentes fines: mejorar la estabilidad mediante el trabajo de propiocepción que en la práctica deportiva podría prevenir una caída y lesión de tobillo, también tener como fin un incremento en el grosor de las paredes celulares que evitará en tu práctica deportiva una ruptura muscular, o bien puede tener como finalidad el reclutamiento de fibras musculares y trabajo intra e Intermuscular que en tu práctica deportiva retrasa la presencia de fatiga, así como un posible desgarre muscular.
Una sentadilla puede fortalecer ligamentos y tendones de una articulación previniendo lesión como un esguince. Sí, efectivamente no realizas la sentadilla durante el partido, pero el fin de ejecutarla no es que se presente ese gesto en la competencia, el fin es elevar el rendimiento y prevenir una lesión.
Esta prevención no solo es para la competencia, tiene un papel fundamental en la preparación previa a la competencia y la especialización. La preparación general brinda la base para soportar la carga intensa de la preparación específica, un descenso en los almacenamientos energéticos puede provocar una lesión, una mala adaptación para almacenar, utilizar y producir energía es un factor predominante en la presencia de lesiones, los niveles de intensidad, de exigencia actuales en la preparación específica requieren de una base general amplia en el organismo que pueda soportar la carga de entrenamiento.
Personalmente, sigo sin entender por qué en varios equipos no se realiza esta preparación general y se justifica como una práctica que representa pérdida de tiempo y que no es específica.
Si bien con base en la idea antes mencionada, el fin de la preparación general es adaptar al organismo para la exigencia específica y prevenir lesiones.
¿Cuántos atletas, entrenos, deportistas, conoces que no realizan calentamiento o bien no ejecutan actividades de preparación general? ?Cuantos más no realizan la vuelta a la calma al final de la sesión? y ¿Cuántos de ellos resultan estar lesionados constantemente?
Sabemos que el organismo debe prepararse al entrenamiento y/o competencia, elevando frecuencia cardiaca, temperatura muscular y oxigenación sanguínea, favoreciendo la lubricación articular, así como la activación muscular mediante ejercicios de flexoelasticidad enfocados a las extremidades a utilizar en el entrenamiento, con el fin de favorecer el desempeño del entreno así como preveni lesiones, de la misma forma debemos pensar en la vuelta a la calma.
La vuelta a la calma, es el final de la sesión de entrenamiento, cuyo fines regresar al organismo a niveles previos a la sesión o lo más cercano, reduciendo la frecuencia cardiaca presentada en el entrenamiento, bajando la frecuencia ventilatoria, reduciendo la temperatura del organismo, realizar actividades de bajo impacto para reducir niveles de lactato, favorecer la oxigenación sanguínea, prevenir lesiones musculares mediante diferentes técnicas de relajación, estiramientos, etc..
Todas estas actividades son importantes como el descanso, en el cual el organismo se recupera de lesiones, se reabastece de energía, favorece la supercompensación, etc. Entrenar más, no solo es incrementar volúmenes o intensidades, es favorecer la recuperación para que el organismo se adapte, evitando así la presencia de lesiones.
De acuerdo con lo anterior debemos ser conscientes, planear, organizar y ejecutar acciones que favorezcan estas actividades con el fin de favorecer la recuperación y adaptación.
El prevenir lesiones deportivas es un tema de suma importancia, que, usualmente en países como el nuestro, se deja pasar por la falta de información y en ocasiones ignorancia. Sin embargo me es difícil pensar que existen los “especialistas” que con todas las armas posibles y conocimientos frescos omiten el descanso, calentamiento o vuelta calma, ¿ acaso no han comprendido que el deportista que tienen es un ser humano?, si buscan un resultado positivo y alargar la vida competitiva del atleta, deberán actualizar los contenidos de la preparación, será beneficioso.
Previniendo lesiones el deportista rendirá más, esto se puede realizar mejorando los rangos de movilidad articular y elasticidad muscular, fortaleciendo ligamentos y tendones articulares, mejorar el tono muscular, engrosamiento de las paredes celulares, incrementando los almacenes de energía, favoreciendo los procesos enzimáticos para la producción de energía y los procesos metabólicos para la resíntesis energética, mejorando la atención del deportista a las actividades que realiza, así como la nutrición, presentando escenarios competitivos variados para favorecer la toma de decisiones, etc., tomando estas precauciones entre otras la vida deportista del atleta podrá alargarse.
Sabemos que hay lesiones que se presentan por accidentes fuera o dentro del entrenamiento, así como en la misma competencia, pero si se puede prevenir la lesión y está en las manos del o los encargados de la preparación del deportista, es nuestra labor hacer todo lo posible para evitar o reducir la gravedad.
Me despido recordándoles que – “nunca omitan la vuelta a la calma”, eso les ayudará a una recuperación adecuada y pronta, evitando lesiones y favoreciendo el incremento de sesiones de entrenamiento. Si no quieren que se limite el desempeño de su deportista por la rodilla, prevengan lesiones a tiempo, la mejor intervención es la prevención-.
LED Manuel Eduardo Acevedo Esparza
Licenciado en Entrenamiento Deportivo
Maestrante en Ciencias Aplicadas al Deporte
Maestrante en Administración
Docente de la Escuela Nacional de Entrenadores Deportivos
Miembro Activo y Capacitador del Colegio Profesional de Licenciado en Entrenamiento Deportivo CPLED
Conductor y Evaluador Master de Competencias Laborales SICCED-CONOCER
Ex-Becario de la Embajada de Estados Unidos, Programa Sports Visitor
Miembro DreamsAble Mex
Antropometrista ISAK
Preparador Físico de la Selección Mexicana de Taekwondo equipo varonil y femenil Combates 2017-2018
Preparador Físico de la Selección Mexicana de Taekwondo equipo varonil y femenil Poomsae y Freestyle 2017-2018
Conductor Academia de Taekwondo CONADE 2018
Entrenador del Equipo Universitario de Taekwondo ENED 2013-2017
