
Dr. Héctor Manuel Icaza Campa.
Mayo/2025
Hoy quiero iniciar de esta forma que pudiera considerarse disruptiva o provocadora y así es, si consideramos que dos de nuestras principales funciones como docentes de educación física son la de promover la práctica sistemática del ejercicio físico y de crear el hábito del ejercicio físico para toda la vida, entonces quizá estén de acuerdo conmigo al hacer esta afirmación.
Veamos por qué, se dice que el sedentarismo es la manifestación de falta de movimiento o actividad física y que este se puede medir en la cantidad de tiempo que permanecemos activos o inactivos, gastando un mínimo de energía y, en contraposición a esto, la Organización Mundial de la Salud (OMS), recomienda que se realicen al menos 150 minutos de ejercicio de alta intensidad o 300 minutos de intensidad moderada a la semana, lo que equivaldría a decir que nos ejercitáramos entre 30 y 60 minutos diarios según el caso y qué creen… ¡No lo hacemos!, somos incapaces de dedicar esa cantidad de tiempo al día para nuestro propio beneficio y salud y esto nos ha hecho ser cada día más flojos, indolentes con nosotros mismos como seres humanos que querámoslo o no, somos seres biológicos que necesitamos del ejercicio para nuestra supervivencia y conservar nuestra salud y así está plenamente demostrado por una gran cantidad de investigaciones (de las cuales no hablaré en esta ocasión). Y por si esto fuera poco y entrando más al tema de la provocación inicial, como profesores de educación física, esto es la viva muestra de nuestro fracaso. Claro, hay muchos argumentos que pretenderán justificar que esto no es nuestra responsabilidad, pero debo decirles que, ¡Claro que es nuestra responsabilidad!, caso contrario sería si hablásemos de obesidad, donde efectivamente, es poca la responsabilidad que podemos asumir; pero el sedentarismo, NO, imposible de evadirla y desde luego, pueden existir excusas o pretextos como que no son suficientes dos clases de 50 minutos por semana, no tenemos suficientes horas de trabajo para dar más clases, no hay material didáctico, hay muchas suspensiones de clases, el programa es malo y no ayuda a fomentar la práctica del ejercicio físico… Es verdad, pero eso no justifica los hechos.
La propia OMS señala que los índices de sedentarismo y que una parte importante de la población mundial no cumple con esos estándares mínimos recomendados y que las consecuencias están a la vista de todos… Y el futuro es poco halagador, las tendencias mundiales en este sentido nos indican que cada vez seremos más las personas sedentarias que no cumplan con esas recomendaciones (Hoy somos ya, más de MIL MILLONES DE PERSONAS) y eso es alarmante.
Para empeorar un poco más el panorama, sabemos también que las consecuencias de esta falta de actividad física cotidiana se reflejan en problemas de salud cada vez más graves, tanto, que hoy se habla de problemas de salud pública y de gastos catastróficos en inversión en el campo de la salud para tratar de atender las enfermedades de carácter no transmisibles derivadas de esta situación.
Por lo anterior, me gustaría ver sus comentarios al respecto, saber si están o no de acuerdo con los argumentos aquí expuestos y las propuestas para resolver esta situación, desde luego, que estas propuestas tendrían que ser surgidas desde nuestra práctica, desde nuestra área de influencia, porque si esperamos a que las autoridades educativas y sanitarias hagan algo al respecto, estamos destinados al fracaso, tanto es así que hace algunos años, autoridades del sector salud hicieron un planteamiento escalofriante (la expectativa de vida del mexicano nacido en esta generación, ha reducido su expectativa de 75 años en el 2010, a 40 años de vida para el 2050, de acuerdo con PREVENIMSS, citado por Tenorio 2008 y reproducido por Ibarra, 2018) y al que nadie puso la atención debida y que posiblemente cuando se quiera intervenir, será demasiado tarde.
Dejo ahí la provocación y en espera de sus comentarios y observaciones.
La Ciencia de la Educación Física
Dr. Héctor Manuel Icaza Campa

Dr. en Ciencias del Deporte. Maestro en Educación. Maestría en Teoría del Entrenamiento en Moscú, Rusia. Especialidad en Educación Deportiva y Prácticas para la salud. Profesor y Lic. en Educación Física. Entrenador de Levantamiento de pesas y atletismo. Fue Subdirector Académico de la Escuela Nacional de Entrenadores Deportivos. Catedrático de la ESEF México, por 30 años. Profesor por horas en la Universidad de Colima. Metodólogo del Deporte en el Instituto Colimense del Deporte. Creador de la Licenciatura en Entrenamiento Deportivo de la Universidad José Martí en Colima. Presidente del Colegio Colimense de Profesionales de la Educación Física. Autor del Manual para la elaboración de planes de entrenamiento Autor del Libro del Profesor de Educación Física. Autor del Libro Filosofía de la Educación Física. Autor del Libro Propuesta de un Modelo de Educación Física con Enfoque Formativo y Orientado a la Salud. Autor del Libro Manual de Levantamiento de Pesas.
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