Por Víctor M. Rodríguez Ocádiz
Octubre 31, 2024
Amena, fluida y muy interesante resultó la plática ofrecida por la sobresaliente competidora paralímpica Cristina Hoffmann Torres dentro del programa quincenal que lleva a cabo la Asociación de Adultos Mayores denominada AMA EDAD que llevó por título “No hay Límites Para el Deporte en Adultos Mayores Discapacitados”.
Dicha Asociación presidida por el educador físico y médico Minahuaztékatl Vázquez Hernández, invitó en esta oportunidad a la tres veces campeona del mundo de tenis de mesa y participante por México en 11 Juegos Paralímpicos.
La brillante y multimedallista mexicana, concursante está convencida que esta especialidad resulta interesante alternativa inclusive para los adultos mayores, aún cuando no tengan discapacidad alguna o utilicen silla de ruedas.
La tricampeona universal, estuvo mucho tiempo en el número uno del ranking mundial, Cristina, hermana de nuestra compañera Paty (QEPD) con quien coincidimos en el trabajo dentro de la Dirección General de Educación Física (DGEF), apareció por primera vez en los Juegos Paralímpícos de Atenas en 2004.
Dio a conocer que desde los 11 meses de nacida sufrió de polio y ahora con 74 años de edad, indicó, que en 1950 la atacó una pandemia de dicha enfermedad y sus padres en aquel entonces no sabían como atacar la problemática a pesar de atenderla en el Hospital San Angel.
Y si eso no fuera poco, después sufrió un accidente que le lastimó la pierna buena como ella le llama. Enseguida probó una silla de ruedas de un hospital y con ella comenzó a adentrarse en el deporte.
Emocionada al relatar su vida dentro de la actividad física, manifestó que nuevamente se adentró en varias disciplinas, tales como el atletismo, en diversas pruebas de pista y campo, así como en el baloncesto.
Se lleva las manos a la cabeza, y logra expresar que fue en Lima, Perú en 1973 con motivo de los Juegos Parapanamericanos que ganó 12 medallas de diferentes metales en competencias atléticas, basquetbol, tenis de mesa y un tercer sitio en arquería.
Esta estupenda actuación, la hizo enamorarse – como ella relata – nuevamente del deporte que había dejado de lado para atender a su familia conformada por dos hijos y su esposo, ingeniero mecánico electricista, quien también sufría una discapacidad.
Tras el éxito señalado líneas arriba, la motivó para realizar entrenamientos diarios en el Deportivo “Gumersindo Romero”, y añadió “Me hicieron más deportista, y para poder comprar una silla de competencia ahorraba cinco pesos cuando asistía a mi preparación”, debido a que no contaba con recursos económicos para comprar un implemento que solamente tenían las competidoras de Estados Unidos y de varios países europeos.
Fue en 1975 con motivo de la celebración de los Juegos Panamericanos celebrados en México cuando debido a su calidad fue designada abanderada de la delegación mexicana y además de encender el pebetero de los Parapanamericanos, integró el equipo de basquetbol que se agenció la presea de bronce.
En 1978 en una contienda mundial efectuada en Holanda, volvió a accidentarse y ello la imposibiltó para participar en el atletismo y fue ahí en donde decidió incursionar en el tenis de mesa.
En 1983 contrajo nupcias con quien fue su compañero de vida y abandonó por completo la pista y el campo. Poco después en Seúl, Corea del Sur, intervino por primera ocasión en unos Juegos Paralimpicos en su nueva especialidad. “Ahí eramos todólogos, participamos en varias competencias de distintos deportes, pues no había muchos participantes.
Para su preparación para la competencias cuatrienal en Beijing, China, contrató a un entrenador privado que le enseñó los secretos de este deporte, sin dejar de asistir a sus sesiones en el “Gumersindo” con ella le llama. En éstos últimos juegos, no logró competir, debido a que nunca llegó su inscripción y ya no pudo calificar.
Vuelve a hacer referencia su familia y manifestó que para los Juegos de Barcelona en 1992 en donde terminó en el escaño 11, se entrenaba junto a su esposo hasta altas horas de la noche, cuando ya habían acostado a sus hijos.
Retornó en su charla e informó que su primera medalla de oro cayó en los Juegos Mundiales de Stoke Mandeville, Inglaterra, cuna del deporte en estas condiciones en 1995.que le sirvió para agenciarse su pase a los Paralímpicos de Atlanta un año después en donde ganó la presea plateada.
Su sobresaliente actuación le permitió ser contratada por las autoridades deportivas para efectuar una campaña de promoción a lo largo y ancho del país en donde llevó material a las entidades que visitó. De ahí en adelante de 15 o 20 deportistas discapacitados que había, aumentó a 100.
De la misma manera se proclamó tres oportunidades como monarca panamericana de 1990 a 1992. Posteriormente en París, Francia en 1998 obtuvo para lo que señala, su mayor y brillante carrera deportiva. Se apoderó del oro en singles, plata en abierto y bronce por equipos, actuación que le valió escalar al número uno del orbe.
En ocho ocasiones se hizo del sitio de honor en el ranking universal casi en forma consecutiva. mismo que cambia cada tres meses. Poco después indicó que desgraciadamente no existe respaldo ni seguimiento a los representantes mexicanos que vienen de abajo.
Regreso a las lides deportivas después de un breve retiro y comenzó a nadar, y consiguió plata y bronce en los eventos en donde participó, de igual forma jugó basquetbol en el mismo gimnasio referido anteriormente, para concluir con el tenis de mesa otra vez.
Al hablar de los beneficios del deporte, primeramente se encuentra la salud, además de desarrollar concentración, coordinación, agilidad mental, no existen límites cuando hay compromiso y dijo conocer a adultos mayores de 50 y 60 años con discapacidad que se ejercita todos los días. Consideró al deporte como muy noble y cualquier persona puede practicarlo.
Para iniciarse en esta actividad indicó que resultará muy importante adaptarse a los diferentes tipos de raqueta y estilos que serán individuales. Consideró un error desplazar al tenis de mesa de las instalaciones del Centro Paralímpico a cargo de la Comisión Nacional del Deporte.
En dos oportunidades se han llevado a cabo competencias que llevan su nombre y son conocidas como Copa Cristina Hoffman en Cancún, Quintana Roo y retrocedió un poco para decir que también se apoderó de 10 medallas en la ciudad de Santiago de Chile.
A pregunta expresa dijo que en la actualidad existe poca gente que se dedique a entrenar y escaso respaldo de las autoridades. Hay clubes que lo programan en sus actividades, pero cobran muy caro, no como en el gimnasio en donde asiste dos días a la semana que mantiene una cuota módica.
Si no hay recursos, insiste, es imposible contar con buenos representantes y más que nada de élite. “Deben conformarse centros de desarrollo, buenos hules, muchas raquetas, pelotas e implementos en gran cantidad y finalmente un aspecto de suma trascendencia como es el actualizar y certificar profesores y entrenadores”, concluyó.