Por Daniel Aceves Villagrán
Existe un Plan Mundial sobre Activación Física 2018-2030 que impulsa la Organización Mundial de la Salud (OMS), cuya visión proyecta “más personas activas para un mundo más sano”, a través de una reducción del 15% en la prevalencia mundial de la inactividad física en la población infantil, adolescente y adulta, mediante los objetivos estratégicos de crear una sociedad con entornos y sistemas activos.
- De igual suerte, los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) incluyen los temas de salud, bienestar, educación de calidad, igualdad de género, paz y alianzas para lograr los objetivos; motivo por el cual la Fundación Alfredo Harp Helú para el Deporte contribuye fomentando la actividad física y el deporte social, atendiendo la nueva realidad en el contexto de la pandemia del covid-19, que, entre otras afectaciones de carácter sanitario, económico, político y social, tiene como generalidad el detrimento de la salud; en este sentido, el aumento del sedentarismo en la población repercute en un incremento de 6 kilos promedio per cápita a nivel nacional e internacional.
- Varias instituciones públicas y privadas relatan como consecuencia severa del confinamiento una deficiente alimentación, más horas de pantalla y menos de actividad física, agravando el problema de obesidad en población infantil y adolescente. Por citar un ejemplo, la Universidad de Washington vaticina que aumentará la tasa de obesidad infantil en 2.4% con el cierre de las escuelas, y para marzo del 2021 se desarrollarán en Estados Unidos alrededor de 1.3 millones de nuevos casos.
- En esta realidad se presenta el Planeador de Activación Física, por un Deporte Social, en conjunto con organismos públicos, privados y académicos que, con base a los parámetros de la OMS, promueven actividades para distintos grupos de edad y una alimentación correcta para que, en un lapso de 100 días, transformemos nuestros hábitos, basando ello en una cultura del autocuidado de la salud, con la posibilidad de llevar un plan personal, en donde describamos pensamientos y sensaciones de lo que será esta sencilla y práctica apuesta asesorada por el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), que reconoce en los estudios realizados múltiples beneficios por la práctica de actividad física.
- Actualmente sabemos que a nivel global las enfermedades no transmisibles son la principal causa de morbilidad y mortalidad, por lo que la tasa de letalidad del patógeno covid-19 se incrementa por las comorbilidades que afectan en la vida, como lo es la salud, el patrimonio y la productividad de muchos millones de mexicanos. La apuesta de las políticas públicas ante esta nueva realidad deberá versar en una cruzada de activación física que cumpla con las expectativas en el ámbito nacional e internacional, encauzadas a rectificar un modelo de prevención que comprenda las determinantes sociales de la salud que incluyen alimentación, salud sexual y reproductiva, crecimiento y desarrollo infantil, entornos físicos saludables y sicosociales, diversidad, equidad y género, actividad física y deporte, derecho a la salud y participación social.
Esencial
Daniel Aceves Villagran
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