BIEN DE MUCHOS, CONSUELO DE POCOS, EL OCIO EL TIEMPO LIBRE Y LA RECREACION

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DIME QUE HACES EN TU TIEMPO LIBRE Y TE DIRE A QUE CLASE SOCIAL PERTENECES

Por Lupe Aguilar Cortez, Ph.D.

En este periodo de aislamiento social, nada es tan cierto como esta premisa, que desde el siglo XIX,  Throsthein Veblen en su clásico Teoría de la clase ociosa plantea,  define a la clase ociosa la que tiene todo el tiempo libre, ya que está liberada de la necesidad de trabajar  y  que tiene a su servicio, apoyo doméstico, es por lo tanto lógico pensar que la clase ociosa, estaré pasando este periodo de contingencia en alguna residencia en donde posiblemente  tendrá jardín e incluso alguna instalación deportiva.

¿Pero qué sucede a todos los que no pertenecemos a la clase no ociosa? ¿La mayoría de los que vivimos en departamentos? 

Para todas estas clases no ociosas, estamos siendo forzados a dejar el trabajo, no es que queremos dejar de trabajar, nos  estamos quedando sin trabajo. para mucho este hecho, ya es fuente de preocupación y estrés, que va a pasar con mi trabajo cuando la contingencia pase, ¿tendré trabajo?

Nuestras viviendas, ya de por sí, reducidas por las pésimas legislaciones que autorizan minidepartamentos, unidades habitacionales con pequeños  espacios para estacionamiento, incluyen espacios verdes para los pequeños. Situación que agrava el no poder salir y quedarnos en nuestro minidepartamento. 

Sin opción a una esporádica salida fuera de nuestra vivienda, nos queda el preocupamos y ocupamos de lo que podemos hacer para organizar a la familia.  Nuevamente como clase no ociosa , esto se reduce al tipo de actividades que podemos realizar, si bien es cierto que las redes sociales han estado ocupadas brindando opciones, de qué hacer, como organizarnos, como seguir haciendo ejercicio. Una vez más, es la clase social a la que pertenecemos la que permitirá cuáles de estas opciones son las que podemos adoptar y aplicar en nuestras viviendas.

Estamos en la tercera fase de la contingencia del Covid19,  acaso ya demos repasado todas las opciones o acaso ya nos hemos quedado sin materiales para más actividades,  estamos sucumbiendo a algo  más sencillo,  sumirnos en el aburrimiento y el sedentarismo a los que nos someten la televisión, la Tablet y el celular. Claro si es que tenemos acceso al internet, Cansados de lo mismo todos los días, nos consume una cotidianidad que lejos de aliviar la crisis del que hacer, nos aburre más. Nos hemos convertido en una clase no ociosa, obligada a un tiempo libre no tan libre que solo refuerza la premisa…. Dime que haces en tu tiempo libre y te diré a qué clase perteneces.

La vida después del Covid19, nos brindará la oportunidad de aprender, nuevas lecciones jamás planteadas. ¿Para muchos que hemos podido hacer home office, seguiremos en esta modalidad? Seguramente muchas empresas se están cuestionando si hay necesidad de tener oficinas presenciales. Pero otro aspecto que estamos aprendiendo de la manera más dura posible, es darle debido contenido al  tiempo libre, la importancia que tiene.  Somos una sociedad educada para el trabajo, no educada para el tiempo libre, y en este momento estamos pagando el precio de este enfoque, al no saber que hacer con el tiempo libre en casa. Resumiendo, somos una clase no ociosa educada solamente para el trabajo.

Lupe Aguilar

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