PensAndo en la Educación Física

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¿Para qué regresar con nuestros estudiantes a la escuela?

Es una realidad, la vida post COVID-19 no será igual. Hoy en día los sistemas educativos planean el regreso a las escuelas, y para que eso suceda el sector salud en conjunto con otros tendrán que pautar un retorno seguro, pero que lamentablemente no podrá garantizar en su totalidad el bienestar de niñas, niños, jóvenes, docentes, directivos, familias y comunidad, pues como me lo ha dicho una querida amiga “la escuela moviliza a la sociedad, y con ello sus virtudes, pero también, todos sus vicios”. 

El confinamiento me sacudió, y día con día me obliga a transitar por diversos estados anímicos y momentos de reflexión con relación a todos mis roles; pero bueno, para efectos de esta columna, quiero compartir lo que por la mente me ha cruzado cuando visualizo mi regreso a la escuela desde mi función como docente especialista de educación física.

Antes que las reflexiones llegaran comencé a tener incomodidad, cierta insatisfacción, dudas y una que otra frustración cuando me pregunté, ¿qué habrán aprendido mis alumn@s en educación física -antes de la pandemia- que  sea de utilidad para contrarrestar los efectos del confinamiento?.  Digo, si lo aprendido aporta nada o muy poco será válido creer que los estoy dejando en cierto estado de indefensión ante lo desconocido y las circunstancias de incertidumbre de los tiempos actuales.

Evidentemente no estoy tranquilo, y para regresar con mis estudiantes me veo en la necesidad de replantear mi función, resignificar mi actuación y transformar mis prácticas desde un análisis a las pautas pedagógicas que me orientan, la naturaleza de mi intervención didáctica y los beneficios que como especialista brindo a mis estudiantes a través de la educación física.

Pues bien, ahora mismo dejo el preámbulo y comparto algunas reflexiones que llegaron a mí en el marco de los buenos deseos y felicitaciones por la celebración del día de las maestras y los maestros.

  • ¿Al niño que fui?, le gustaría salir a educación física conmigo hoy que soy docente.
  • La autoridad educativa debe ajustar el proyecto de la Nueva Escuela Mexicana, pero en mi escuela soy corresponsable de convertirla en realidad dentro de este contexto de incertidumbre generado por la pandemia. 
  • El enfoque didáctico de la educación física orienta mi intervención, pero lo redactaron antes del confinamiento y todos sus efectos, ¿qué puedo incorporarle para enriquecer mi práctica docente y los aprendizajes de mis estudiantes en la sesión?
  • Los contenidos del programa de estudio de la asignatura son importantes, pero mis estudiantes lo son aún más. 
  • Los aprendizajes clave son el punto de partida, pero la clave está en reconocer sus intereses para motivar el gusto por aprender en educación física, más allá de sus espacios, tiempos, estrategias, medios y contenidos.
  • ¿Cómo diseñar, organizar y conducir la sesión para que mis estudiantes a través de sus diálogos y propuestas prácticas construyan su aprendizaje, y el que hablen o sugieran deje de ser lo que interrumpe “mi clase”? Es decir, de qué manera puedo transformar mis métodos de enseñanza para que su comunicación durante la sesión de educación física sea propiciada y no prohibida. 
  • Ante la nueva realidad, qué sentido tiene que en educación física nuestros estudiantes deban saber las medidas de la chancha, el reglamento de algún deporte, o cumplir con el uniforme completo para evaluarlos y otras situaciones. Bien entonces, ¿qué será pertinente enseñar, aprender y evaluar cuando regresemos a la escuela en educación física más allá de lo que marcan nuestros intereses o el programa de estudio?. Vale la pena reflexionarlo, pues tenemos que atender situaciones prioritarias desde nuestra asignatura una vez que niñas, niños y jóvenes regresen a la escuela.
  • ¿Cómo aprovechar el potencial formativo del juego cooperativo frente a una realidad en la que es necesario guardar la distancia y evitar el contacto?  De no tratar con cuidado  esta situación podría estarse gestando la generación que normaliza el rechazo al otro, que desconfía de todo y de tod@s, que se aísla para salvaguardarse, que no comparte por garantizar bienestar, que no ayuda por temor a…, que no colabora porque lo importante es que yo esté bien. ¿cómo tratar esto desde la escuela y en especial desde la educación física?
  • ¿Debo seguir comprando o pidiendo planificaciones y/o libros para ver qué actividades y juegos propongo a mis estudiantes, o tendrían que ser sus intereses y necesidades formativas la razón que me oriente para diseñarlos conjuntamente con ellos?   …digo, para que así pueda plantear y vivenciar actividades de aprendizaje auténticas y dejar de utilizar el falso discurso del aprendizaje significativo. Si, ya basta de replicar o adquirir planificaciones y consultar libros y ficheros llamados “un mil juegos y actividades para…”.
  • Ante esta situación que nos aqueja, además de los aprendizajes que de forma natural promueve la educación física, ¿qué otros asociados son de pertinencia frente a los efectos post COVID-19 desde la educación física?
  • Qué y cómo hacer para que algunos de mis colegas vayan olvidando frases como: “niñ@s, guarden silencio”, “ya quédense quietos”, “si no se apuran aquí nos vamos a quedar y no van a salir a…”, “ve a sentarte por favor” y otras tantas. Creo que todos debemos contribuir a replantear la dinámica escolar, es más, valdría la pena atrevernos a estar menos tiempo en el salón, ya ha sido bastante con el encierro de casa, además, la escuela es por excelencia un espacio de interacción social.
  • Y habiéndome cuestionado esto en los últimos días, sobre qué otros temas puedo reflexionar para que mi regreso a la escuela me confirme en un tiempo que he fortalecido y explotado positivamente mis virtudes como persona y docente, tanto que no tenga tiempo para mantener con vida algunos de mis vicios en la docencia.

…ah, es cierto, vino a mi mente lo siguiente: ¿será que algún colega que ejerce en aula, alguna dirección o supervisión escolar ha experimentado esta insatisfacción positiva con relación a sus funciones y responsabilidades?

Se imaginan, que sigamos planeando el regreso a las escuelas y estemos pasando por alto el PARA QUÉ VAMOS A REGRESAR CON NUESTROS ESTUDIANTES A LA ESCUELA.

Juan Carlos Escobar Alba

Maestría en Educación por la UVM, Licenciatura en Educación Física por la ESEF México y Diplomado enDesarrollo Organizacional y Gestión del Cambio por el ITAM.

Director Operativo del PEA y asesor de procesos de formación continua a nivel nacional en coordinación con los departamentos de Educación Física.

Participación en eventos nacionales e internacionales de Educación Física, asesor externo para IAE A.C, el CENEVAL, el INEE.

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